Porque lo único más fuerte que el miedo es la esperanza
miércoles, 30 de enero de 2013
Empecé a ver Friends porque quería tener un referente nuevo sobre la amistad, ver cómo sería una idealización de una relación de amigos. A pesar de que tiene muchas cosas irreales para darle el toque de comedia y los clichés de novela gringa que tiene, sí sentí algo muy real. Me identifiqué demasiado con un personaje y vi reflejadas muchas de mis conductas y mis sueños en él. Es por eso que me llegó tanto, porque si bien es cierto no soy 100% Chandler Bing, sí soy mucho de eso, sí utilizo las burlas pesadas como acto reflejo de defensa personal, sí temo enormemente al compromiso, sí a veces siento que nadie me conoce ni me escucha, pero al igual que él tengo tantas ganas de amar, de componer mi vida, de ser una persona más grande, en mi manera particular, a mi propio estilo.
No lloraba con algo ficticio desde hace más de diez años y esta escena made me cry my ass out (expresión recurrente en la serie, no me atrevería a traducirla), es todo lo que quiero en mi vida, amar tanto a alguien que el solo hecho de tenerle cerca mío sea suficiente para sentirme el hombre más feliz del planeta.
Será mucho pedir, será demasiado soñar poder vivir algo así? Lo cierto es que la ficción acabó y debo esperar a que la realidad haga lo suyo. Mientras, sigo intentando :)
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