El verano, época mágica donde la gente toma un respiro de sus actividades cotidianas que a veces les asfixian. Este verano fue, por decir lo menos, fuera de lo común. Atravezar la capital diariamente con 30° de calor no es algo que uno suela hacer en esta época tan agradable del año, pero fue así como por cosas del destino enero fue un mes más de clases en la U. Sin duda el calor ponía el toque especial a estas clases, haciéndonos caer en las manos de Morfeo durante las clases, haciéndonos vivir con ganas de tirarse en el pasto a la sombra, haciéndonos odiar cada día un poquito más a nuestra facultad. Para más remate tomé muchos ramos y me sentí colapsado más de una vez, pero finalmente todo fue mejor de lo esperado ye terminé feliz de la vida dando solo 2 exámenes de los 6 que debía, de hecho aún recuerdo mi cara de felicidad absoluta cuando caché que me iba a eximir de Cálculo, llegué a mi casa riéndome solo (y eso estuve sin comer nada desde el almuerzo hasta que volví, como a las 8). Para terminar con esta parte horrible del verano, puedo decir con orgullo que pasé todo y que Beauchef es un lugar para el terror.
Las fistas de inicio del verano, la Navidad y el Año Nuevo, momentos para juntarse a compartir con quienes queremos, sin duda esta Navidad fue más bonita que varias anteriores, estuvimos todos untos en familia y yo estaba particularmente feliz porque había visto a mi amiga que se fue a estudiar a Arica. Me carga recibir regalos y más cuando siento que no necesito nada, pero el set de limpieza del notebook y la fundita para éste me gustaron harto y para qué hablar de los audífinos. Sin embargo me encanta regalar cosas, me gusta preocuparme por dar algo que la otra persona necesite, solo por cariño. El año nuevo fue otra cosa, estuvimos todo el día bien tranquilos, sin apuros como otros años, empezamos a cenar a una hora prudente (no como de costumbre xD) tuvimos tiempo de agradecer a Dios por las cosas buenas que tuvimos el año pasado y de conversar harto, además yo estaba impaciente para ver a mis Rottens después de las 12... Después de afectuosos abrazos familiares, vino el postre, el ponche y los buenos deseos para el siguiente año. Empezaron a pasar los minutos y las horas y la Nico no me llamaba, le marqué y me dijo que el radiotaxi no llegaba, que había llamado a varios y no pasaba nada, yo llamé a unos cuantos sin resultado. Llamé a la Nico de nuevo y le dije que nos fuéramos caminando, que la pasaba a buscar con mis papás, pero ella muy sumisa me dijo que su mami no la dejaba... y me pregunto cuándo, cuándo pusiste de lado a tus amigos por tu mami, cuántas veces no le dijiste que ya estabas grande y que no te importaba lo que pensara, tal vez sea egoísta, pero me sentí decepcionado y me siento decepcionado hasta el día de hoy, la junta de año nuevo era nuestra única tradición y tú la quebraste, yo tenía tantas ilusiones de verlos de nuevo...
Después de dar el examen de Electro, comenzaron mis vacaciones y se venía algo nuevo que inquietaba mi alma...
Xebahhh...
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Deja tu huella...