Bloqueado.
Veo los días pasar frente a mis ojos y yo sin reacción.
Estoy cansado, pero no físicamente, no por el gimnasio, ni por dormir poco, ni por comer mal, ni por los eternos viajes en metro, ni por trabajar y estudiar al mismo tiempo.
Estoy cansado del alma, desgarrado. Lánguido.
Así no se puede.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Deja tu huella...