Por la cresta que estoy enchuchado, iba a La Florida a hacer la capacitación y, en el trasbordo de La Cisterna, se me acerca un tipo más o menos viejo y me pregunta que cómo llegaba a Grecia. Yo muy amablemente le dí las indicaciones y él me respondía que nunca andaba por ahí y que estaba medio desorientado. En la buena onda me pregunto que si yo iba donde mismo y yo, el muy saco de mierda, le dije "no, pero voy a Vicuña, que es donde tiene que hacer trasbordo" y me preguntó si se podía ir conmigo. Maldito el momento en el que fui tan confiado y le dije que bueno, por la chucha no sé en qué estaba pensando. El gallo era parecido a mi viejo y tenía pinta de buena onda igual, cuando en la conversa revela sus verdaderas intenciones. Me hablaba de un terno que tenía que ir a buscar y que trabajaba en el Alto Las Condes, cuando de la nada me dice "Oye que eres lindo". Conchemimadre. Quedé en shock, de verdad. Fue demasiado inesperado, aleatorio y sorpresivo. Le dije "¿Cómo?" y muy descaradamente me dice "Eso, ¿No te habían dicho antes que eres lindo?". ¡Qué wea le pasa! Yo estaba mal, quedé muy desmoralizado, aparte ya le había vendido mi alma al diablo, el tipo sabía donde tenía que bajarme. A pesar de que lo evité, justo había caminado hasta la parte más vacía del andén, para irme sentado. Viejo asqueroso va y se sienta al lado mio. Yo, honestamente pa la cagá. "Hay tanta gente mala en el mundo, así que hay que andar con cuidado" "El día estaba rico pa quedarse en la camita, jugando con el niño ¿O no?" "Yo me siento acá al ladito del fierro ¿Qué mejor?".
Yo lo miraba con cara de culo por que en realidad no sabía que hacer, no podía sacarle la cresta,porque iba a salir perdiendo y en verdad estaba tan cagado mentalmente que no atiné a hacer nada. Estaba helado, mirando hacia adelante, deseando que la mierda desituación se acabara luego.
-"Apréndete mi número, es el..."
-"ok"
-"pero, ¿te lo aprendiste?"
-"mm"
-"pero si es fácil es el... llámame en la noche po"
Gracias a Dios llegamos a Vicuña y escapé. Me sentía basura. Mi ego se había ido a la mierda. Estaba perseguido, miraba hacia atrás a cada rato. Viejo de mierda. Por la chucha ¿Por qué me pasan esas cosas?
Por culpa de gente así vivimos en esta sociedad individualista, donde nadie confia en nadie... lo que es yo, lo voy a pensar mil veces antes de dar una indicación en la calle.
Por la chucha.
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